Pasado mañana habrán transcurrido cuatro años desde que no me siento a escribir.
Casi a diario pienso que mi vida tendría más sentido si me pusiera a hacerlo.
Y prácticamente todos los días pienso que no hay demasiado sentido en lo que hago.
No quería dejar que llegasen a cumplirse esos cuatro años (mil cuatrocientos sesenta y un días) sin haber añadido una sola palabra a este blog, que en algún momento fue motivo de un orgullo relativo.
Voy a volver. No sé si lo reflejaré aquí o si lo mantendré en privado.
Escribir es el objetivo.
Y luego el resto.
Casi a diario pienso que mi vida tendría más sentido si me pusiera a hacerlo.
Y prácticamente todos los días pienso que no hay demasiado sentido en lo que hago.
No quería dejar que llegasen a cumplirse esos cuatro años (mil cuatrocientos sesenta y un días) sin haber añadido una sola palabra a este blog, que en algún momento fue motivo de un orgullo relativo.
Voy a volver. No sé si lo reflejaré aquí o si lo mantendré en privado.
Escribir es el objetivo.
Y luego el resto.
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