Veamos. Esto es un blog. Mi blog. Blog me parece una palabra estúpida, como la mayoría de las que se inventan últimamente: E-mail, metrosensual, videoconsola, L-casei munitas... Mi blog se va a llamar:
Intereses Impersonales
Graciosa expresión. No lo considero un nombre estúpido.
Yo soy Tristán. Es mi nombre, qué le vamos a hacer.
Mi tío se llama Aniceto. Eso es peor.
No sé en qué va a terminar esto, honestamente.La cuestión será empezar a escribir aquí. Lo que sea. Llenar páginas y páginas con palabras que nunca acaban de salir, ya sea por falta de un interlocutor adecuado, por ausencia de valor o simplemente porque no encuentro el momento.
Total. Que en estas estamos. En el Puerto de Sagunto. Trabajando en una obra (Planta de Regasificación de Sagunto) que posiblemente estalle cuando se ponga en marcha. Eso serán fallas y no las de Valencia. Hoy es miércoles, 3 de Agosto. Faltan cinco días para que yo cumpla 29 años. Será la última vez que mi edad comience por 2, a no ser que llegue a cumplir 200 años. Eso sería gracioso. Ahora bien, no me gustaría tener pérdidas por entonces. Supongo que a esa edad ya habré meado mi próstata cuarenta veces y tendré un grifo de manguera para controlar mis aguas menores.
No quiero ser como Concha Velasco. Una gran actriz (o no) que ha perseguido la dignidad durante años y que de repente reaparece, con su pelo teñido, con su más apabullante sombra de ojos y con una sonrisa serena, afirmando, sin temblar, que ella se mea. Y lo dice tan feliz. Tiene pérdidas y no pasa nada. Fíjate tú.
También me haré caca. Solamente me pregunto una cosa a este respecto. Y ya termino, porque al fin y al cabo, tengo otras cosas que hacer. ¿Serán tan bonitas las mañanas? ¿Acabaré ensimismado cuando vea atardecer en la playa de mi pueblo? ¿Me seguirán gustando el cielo y las nubes, las montañas, los pájaros y las mujeres, el vino y todo lo que realmente me agrada si me hago caca?
Me gustaría que alguien respondiese. Quiero saber si la vida merece la pena cuando te haces caca y te tienen que limpiar.
Necesito saberlo.
El día que me tengan que limpiar la caca podrá significar tres cosas:
ResponderEliminar1.- Que haya alcanzado el poder suficiente para obligar a alguien a hacer tan exótica tarea (sobre todo tras una noche de alcohol y farruquitas)
2.- Que haya alcanzado la suficiente libertad intelectual para que algo (objetivamente) tan irrelevante (pero subjetivamente tan obsceno), tenga el privilegio de lo cotidiano.
3.- Que haya llegado la hora en que todo te pasa por el arco del triunfo, incluido el que alguien te tengan que limpiar la caca. Y creerme si os digo que en la mayoría de los casos llega... es la sabiduría de la naturaleza.